Foto minha: Escultura do museu DeCordova Mi cabeza Luis Quintanilla Mi cabeza es una ave herida que ya no encuentra nido. Mi cabeza, pálida y rubia, Rubia y rizada. Recuerdo aún cuando dormía sobre las blandas almohadas de una cama blanca y tranquila. Hoy, mi cabeza es un globo: un globo sin rumbo escapado de mis dedos. ¡Ah, si pudiese estar llena de vino como los focos de luz! Cuánta poesía, cuánta alegría todavía cabría, si pudiera llenarte de luz… Luna. Nubes. Almohadones de una cama blanca y tranquila. Han pasado campos, ciudades y montes y sigue desfilando el horizonte. “¡Buenas noches!”, madre mía… ¡Qué horror! Ya no queda más que su reflejo en el espejo glacial de los ríos y todos los ríos la llevaron al mar; al mar
Basicamente, mas não exclusivamente literatura: prosa e poesia.